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lunes, 17 de enero de 2011

Deshidratado


Deshidratación en verano
El calor nos hace perder líquido a través de la transpiración, por eso en verano tenemos que beber mucho más que en invierno, aun si no tuviéramos sed. Lo recomendable es entre 1 y medio y 2 litros por día.

El agua y los jugos de frutas recién exprimidos son las mejores elecciones. También puede compensar el calor con frutas frescas y hortalizas. El alcohol reduce el líquido dentro del organismo y las gaseosas o jugos artificiales muy azucarados no calman la sed y hacen que el páncreas trabaje el doble.

Cuando una persona está deshidratada debe tomar sales de rehidratación oral disueltas o la siguiente solución: el jugo de un limón mezclado con un litro de agua mineral, media cucharadita de cloruro de magnesio y una pizca de sal. Tome dos vasos juntos de a sorbos pequeños y el resto a lo largo del día.

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