Los principales valores
- Albúmina o proteínas
En un sujeto normal, la eliminación de proteínas en la orina es muy baja. Por esto, en el análisis de laboratorio suele aparecer la frase "ausente" o "en pequeñas dosis", lo que indica que el valor es menor de 40 miligramos
Solamente un defectuoso equilibrio alimenticio o un esfuerzo físico prolongado pueden provocar una protelnuria pasajera. Si ella es superior a 2 g/24 horas, es signo de un problema renal.
- Glucosa
No debemos encontrar glucosa en la orina, aunque solemos encontrarla en forma de rastros en la orina de 24 horas. Si hay presencia de glucosa en la orina permanentemente, esta glucosuria puede significar una diabetes o una lesión de los conductos renales. La glucosuria aparece con frecuencia durante el embarazo o en el período de lactancia debido a modificaciones hormonales.
Esta alteración no es grave si no está acompañada de otros síntomas y si la tasa de azúcar en sangre es normal.
- Acetona
Se produce en el organismo en el curso del metabolismo de las grasas. Normalmente, ella genera inmediatamente una serie de transformaciones.
Hay cuatro motivos por los que el analista puede encontrar restos de acetona en la orina: el ayuno glucídico (falta de azúcar), vómitos prolongados, algunos medicamentos, o las afecciones febriles agudas como la tifodea o el paludismo.
En el caso de diabetes, la acetona es el signo premonitorio del coma (aunque hay otros signos que también alertarán al enfermo).
- Pigmentos biliares
La presencia de pigmentos billares en la orina Indica alteraciones hepáticas o de las vías biliares. Este examen se hace sobre todo para confirmar una Ictericia, la enfermedad típica de las abuelas, que se acompaña de una coloración amarilla de la piel y del blanco del ojo. Esta patología no es igual que una hepatitis. Podemos sufrir de una Ictericia sin hepatitis y de una hepatitis sin ictericia.
- Hematíes: glóbulos rojos
Estos pequeños discos rojos que forman parte de la composición sanguínea pueden detectarse en la orina mediante un análisis al microscopio. Se encuentran menos de 10.000 por mi. Más allá de esta cifra, podemos decir que hay una hematuria, cuya causa hay que buscar. Todas las enfermedades urinarias pueden acompañarse de una hematuria, Entre las patologías más frecuentes podemos hallar la cistitis o la uretritis. En el hombre, ésta puede significar un trastorno prostático. La presencia de sangre en la orina puede indicar la existencia de quistes, de cálculos renales o vesiculares. No obstante, serán necesarios otros exámenes para encontrar la causa real de la hematuria. Una sobredosis de medicamentos anticoagulantes también puede provocar este trastorno en la composición de la sangre.
- Leucocitos: glóbulos blancos
A la inversa de los hematíes, los leucocitos son los glóbulos blancos, también presentes en la composición química de la orina en pequeñas cantidades (menos de 10.000 por mi). Superando este valor, podemos hablar de una Infección o de una inflamación renal.
- Albúmina o proteínas
En un sujeto normal, la eliminación de proteínas en la orina es muy baja. Por esto, en el análisis de laboratorio suele aparecer la frase "ausente" o "en pequeñas dosis", lo que indica que el valor es menor de 40 miligramos
Solamente un defectuoso equilibrio alimenticio o un esfuerzo físico prolongado pueden provocar una protelnuria pasajera. Si ella es superior a 2 g/24 horas, es signo de un problema renal.
- Glucosa
No debemos encontrar glucosa en la orina, aunque solemos encontrarla en forma de rastros en la orina de 24 horas. Si hay presencia de glucosa en la orina permanentemente, esta glucosuria puede significar una diabetes o una lesión de los conductos renales. La glucosuria aparece con frecuencia durante el embarazo o en el período de lactancia debido a modificaciones hormonales.
Esta alteración no es grave si no está acompañada de otros síntomas y si la tasa de azúcar en sangre es normal.
- Acetona
Se produce en el organismo en el curso del metabolismo de las grasas. Normalmente, ella genera inmediatamente una serie de transformaciones.
Hay cuatro motivos por los que el analista puede encontrar restos de acetona en la orina: el ayuno glucídico (falta de azúcar), vómitos prolongados, algunos medicamentos, o las afecciones febriles agudas como la tifodea o el paludismo.
En el caso de diabetes, la acetona es el signo premonitorio del coma (aunque hay otros signos que también alertarán al enfermo).
- Pigmentos biliares
La presencia de pigmentos billares en la orina Indica alteraciones hepáticas o de las vías biliares. Este examen se hace sobre todo para confirmar una Ictericia, la enfermedad típica de las abuelas, que se acompaña de una coloración amarilla de la piel y del blanco del ojo. Esta patología no es igual que una hepatitis. Podemos sufrir de una Ictericia sin hepatitis y de una hepatitis sin ictericia.
- Hematíes: glóbulos rojos
Estos pequeños discos rojos que forman parte de la composición sanguínea pueden detectarse en la orina mediante un análisis al microscopio. Se encuentran menos de 10.000 por mi. Más allá de esta cifra, podemos decir que hay una hematuria, cuya causa hay que buscar. Todas las enfermedades urinarias pueden acompañarse de una hematuria, Entre las patologías más frecuentes podemos hallar la cistitis o la uretritis. En el hombre, ésta puede significar un trastorno prostático. La presencia de sangre en la orina puede indicar la existencia de quistes, de cálculos renales o vesiculares. No obstante, serán necesarios otros exámenes para encontrar la causa real de la hematuria. Una sobredosis de medicamentos anticoagulantes también puede provocar este trastorno en la composición de la sangre.
- Leucocitos: glóbulos blancos
A la inversa de los hematíes, los leucocitos son los glóbulos blancos, también presentes en la composición química de la orina en pequeñas cantidades (menos de 10.000 por mi). Superando este valor, podemos hablar de una Infección o de una inflamación renal.
