Los bebés deben dormir beca arriba
De esta forma se evita la tan temida "muerte blanca"
Durante la 48° Convención de Bichat, de la que participaron expertos pediatras franceses se concluyó que los bebés deben ser puestos a dormir sobre su espalda o de costado, pero nunca boca abajo, excepto en los casos de espasmo de esófago. Los estudios realizados sobre el síndrome de la muerte blanca (la muerte súbita por apnea del sueño, por ejemplo, cuando el bebé deja de respirar) revelaron que en el 85 por ciento de los casos estudiados el bebé estaba durmiendo boca abajo.
Esto ha ayudado a ver que estadísticamente se ha demostrado que hay una correlación significativa entre la posición ventral para dormir (boca abajo) y la muerte blanca. Un bebé colocado en posición ventral entierra su cabeza en la almohada y respira aire rarificado. Esto aumenta el riesgo de asfixia que a menudo puede ser fatal para los bebés de dos a cuatro meses.
Cuando un bebé con espasmos de esófago debe ser acostado sobre el vientre es necesario elegir muy cuidadosamente su colchón y tener cuidado con los que son demasiado blandos.
Más aún, campañas masivas realizadas en Holanda, Gran Bretaña, Australia y Nueva Zelandia recomendaban a los padres colocar a sus bebés sobre la espalda. Como resultado fue registrado un decrecimiento del 30 al 67 por ciento de casos de muerte súbita.
De esta forma se evita la tan temida "muerte blanca"
Durante la 48° Convención de Bichat, de la que participaron expertos pediatras franceses se concluyó que los bebés deben ser puestos a dormir sobre su espalda o de costado, pero nunca boca abajo, excepto en los casos de espasmo de esófago. Los estudios realizados sobre el síndrome de la muerte blanca (la muerte súbita por apnea del sueño, por ejemplo, cuando el bebé deja de respirar) revelaron que en el 85 por ciento de los casos estudiados el bebé estaba durmiendo boca abajo.
Esto ha ayudado a ver que estadísticamente se ha demostrado que hay una correlación significativa entre la posición ventral para dormir (boca abajo) y la muerte blanca. Un bebé colocado en posición ventral entierra su cabeza en la almohada y respira aire rarificado. Esto aumenta el riesgo de asfixia que a menudo puede ser fatal para los bebés de dos a cuatro meses.
Cuando un bebé con espasmos de esófago debe ser acostado sobre el vientre es necesario elegir muy cuidadosamente su colchón y tener cuidado con los que son demasiado blandos.
Más aún, campañas masivas realizadas en Holanda, Gran Bretaña, Australia y Nueva Zelandia recomendaban a los padres colocar a sus bebés sobre la espalda. Como resultado fue registrado un decrecimiento del 30 al 67 por ciento de casos de muerte súbita.