Baño turco, baño findandés y sauna: Estos baños no sólo sirven para transpirar sino también para relajarse, desintoxicarse y reducir el tejido adiposo de algunas partes del cuerpo. Para poder realizar alguno de estos baños en su casa sólo tiene que comprar las espumas, sales, aceites y las hierbas aromáticas indispensables. Lo demás se lo indicamos nosotros:
A. Saqúese todas sus alhajas antes de entrar al baño porque el metal al calentarse puede quemarlo.
B. Tome una ducha tibia, enjabónese y enjuagúese. Recuerde que la piel debe estar perfectamente limpia para eliminar mejor las toxinas.
C. Cierre herméticamente todo el baño para que el vapor se expanda por todo el cuarto, llene la banadera con agua bien caliente y agregúele uno o dos kilos de sal gruesa. Agite el agua hasta que la sal esté completamente disuelta.
D. Sumérjase hasta que el agua cubra todo su cuerpo y relájese. Permanezca en el agua no menos de media hora (considere que este baño le puede bajar la presión arterial, por lo tanto le aconsejamos que lo haga por la noche, antes de acostarse, o después de haber realizado las tareas más cansadoras del día.)
E. Cuando haya finalizado, vuelva a tomar una ducha fría, enjabónese y dúchese con agua fría, comenzando por los pies y ascendiendo hasta la cabeza.
F. Al salir, seqúese con una toalla y acuéstese en la cama envuelta en otra toalla seca o en una bata. Descanse otra media hora y no reprima su deseo de dormir.
G. Si después del baño desea darse una ducha lo puede hacer, pero trate de utilizar jabón de glicerina.
H. Póngase crema humectante en todo el cuerpo, haciéndose un suave masaje.
A. Saqúese todas sus alhajas antes de entrar al baño porque el metal al calentarse puede quemarlo.
B. Tome una ducha tibia, enjabónese y enjuagúese. Recuerde que la piel debe estar perfectamente limpia para eliminar mejor las toxinas.
C. Cierre herméticamente todo el baño para que el vapor se expanda por todo el cuarto, llene la banadera con agua bien caliente y agregúele uno o dos kilos de sal gruesa. Agite el agua hasta que la sal esté completamente disuelta.
D. Sumérjase hasta que el agua cubra todo su cuerpo y relájese. Permanezca en el agua no menos de media hora (considere que este baño le puede bajar la presión arterial, por lo tanto le aconsejamos que lo haga por la noche, antes de acostarse, o después de haber realizado las tareas más cansadoras del día.)
E. Cuando haya finalizado, vuelva a tomar una ducha fría, enjabónese y dúchese con agua fría, comenzando por los pies y ascendiendo hasta la cabeza.
F. Al salir, seqúese con una toalla y acuéstese en la cama envuelta en otra toalla seca o en una bata. Descanse otra media hora y no reprima su deseo de dormir.
G. Si después del baño desea darse una ducha lo puede hacer, pero trate de utilizar jabón de glicerina.
H. Póngase crema humectante en todo el cuerpo, haciéndose un suave masaje.
