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jueves, 12 de enero de 2012

Verdades sobre la hipertensión arterial


- Las pildoras anticonceptivas pueden provocar mayor tensión en las arterias de las mujeres que las consumen.
Lamentablemente, sí. Se estima que esta reacción es experimentada por el cinco por ciento de las mujeres que las utilizan. Por esa razón, si usted desea tomar pastillas anticonceptivas consulte con su ginecólogo sobre el uso de una variante con un bajo contenido de estrógeno y progesterona.

- Una dieta de bajo contenido en sal es la mejor manera de controlar la hipertensión.
Verdadero. Controlar el uso de la sal (cloruro de sodio) al cocinar y al condimentar los alimentos es muy importante para disminuir la presión arterial, ya que este condimento es uno de los responsables de que se eleve la presión arterial. El consumo de sal estrecha a menudo las vías de paso de las pequeñas arterias, además de propiciar que las glándulas segreguen determinadas hormonas que también pueden contraerlas y eleven así !a presión. Un exceso de cloruro de sodio produce retención de líquidos en el organismo.

- La hipertensión esencial puede ser hereditaria.
Es cierto. Esta enfermedad se produce más habitualmente en personas con historia familiar de presión arterial elevada. Se demostró que si uno de los padres padece esta enfermedad, existe un 50 por ciento de posibilidades de que uno de sus hijos pueda desarrollarla. Si ambos progenitores la sufren, el riesgo de que aparezca en algún descendiente aumenta a un 90 por ciento.

- El examen del fondo de ojo es esencial p? determinar signos de hipertensión.
Correcto. El médico estudia el fondo de ojo del paciente (técnica conocida como oftalmoscopía) porque es una de las partes del cuerpo que ofrecen una mejor visión de los vasos sanguíneos. En los casos de hipertensión maligna, la mancha óptica -que normalmente tiene forma de disco pálido en el fondo de ojo- se hincha y evidencia bordes borrosos.

- El contacto con mascotas puede evitar la aparición de la tensión arterial.
Tal cual. En realidad, cualquier pasatiempo que calme sus nervios y distraiga su atención lo ayudará a reducir los niveles de su presión arterial.

martes, 13 de diciembre de 2011

Mentiras sobre Hipertensión Arterial


- Los síntomas de la hipertensión siempre son evidentes.
No es cierto. En las primeras etapas los pacientes pueden tener pocos síntomas y no es extraño que la hipertensión se descubra en un examen médico de rutina. Sin embargo, las señales más frecuentes de esta enfermedad son dolores de cabeza, vértigo, sensación de frío, irritabilidad, problemas visuales y auditivos, tiormigueo en los miembros, calambres en las pantorrillas y hemorragias nasales, entre otras.

- Su tratamiento no es imprescindible.
Falso. La hipertensión arterial se trata siempre, aun si el paciente no tiene síntomas, para evitar problemas mayores. Las estadísticas muestran que estas personas tienen un riesgo incrementado de hemorragia cerebral, insuficiencia cardíaca, enfermedad coronaria y problemas renales. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), uno de cada 100 hombres de 50 años con 18 de presión máxima podría sufrir un accidente cerebrovascular en un plazo de ocho años.

- La única manera de verificar que la hipertensión sea esencial es midiendo la presión de la arteria que está sobre el codo del paciente.
No. Antes de llegar al diagnóstico de hipertensión esencial es necesario llevar a cabo una serie de investigaciones, sobre todo si se trata de pacientes jóvenes. Estos exámenes complementarios pueden ser físicos, de orina, sangre, etcétera.

- Comer pescado puede generar un aumento de la presión arterial.
Es incorrecto. Estudios preliminares de la Universidad de Maryland sugieren una asociación entre la ingestión de pescado o ácidos grasos poliinsaturados y la reducción de la presión sanguínea. La teoría de los científicos es que este aceite -residente en el salmón, atún y caballa- contrarresta los efectos de la hipertensión. La recomendación, entonces, es comer pescado dos veces por semana como mínimo y cuatro si es posible.


- La hipertensión arterial es una afección propia de las personas mayores.
Es erróneo. Cada día aumentan las pruebas de que se trata del resultado de un proceso que comienza en una época temprana de la vida. Los expertos coinciden en que la prevención debe comenzar en la niñez, ya que es entonces cuando se inician los procesos de hipertensión y se configuran los hábitos del futuro estilo de vida: fumar, comer excesivamente y practicar o no ejercicios físicos.