INCLINE LA BALANZA
Si su hijo es obeso, existen caminos para impedir el avance de la aguja de la balanza:
- No dé al niño cualquier tipo de medicamento para disminuir el apetito.
- Busque orientación médica para detectar la causa del exceso de peso,
- Recurra a los tratamientos de mediano y largo plazo, con una dieta equilibrada. Los regímenes rigurosos no van con los chicos.
- No impida que el chico coma todo lo que le guste. Lo Ideal es hacerle entender que los excesos son perjudiciales. Por ello, los padres deben estar más atentos a las cantidades de comida consumida que de los alimentos propiamente dichos.
- Respetar los horarios de comida. Cinco o seis ingestas alimenticias diarias (incluyendo tentempiés de media mañana o media tarde) son más que suficientes. Algunos médicos son más flexibles al respecto, y no se preocupan tanto por la cantidad de comidas, sino por el número de calorías Ingeridas diariamente.
- No administre alimentos dietéticos por cuenta propia. Para el éxito del tratamiento es necesario seguir las Indicaciones del especialista que acompaña el caso.
- Incluir al protagonista de la dieta (el chico) en el control de la misma. Si el régimen consiste en el recuento calórico, permita que él anote en una tabla la cantidad de valores diarios consumidos, por ejemplo.
ALGUNOS CONSEJOS PRACTICOS
Más allá de las dietas, existen algunos trucos que podrán contribuir a que los niños mantengan el peso.
- Dejar siempre un poco de comida en el plato.
- Usar platos pequeños.
- Masticar bien los alimentos.
- No comer mientras se desarrolla otra actividad.
Si su hijo es obeso, existen caminos para impedir el avance de la aguja de la balanza:
- No dé al niño cualquier tipo de medicamento para disminuir el apetito.
- Busque orientación médica para detectar la causa del exceso de peso,
- Recurra a los tratamientos de mediano y largo plazo, con una dieta equilibrada. Los regímenes rigurosos no van con los chicos.
- No impida que el chico coma todo lo que le guste. Lo Ideal es hacerle entender que los excesos son perjudiciales. Por ello, los padres deben estar más atentos a las cantidades de comida consumida que de los alimentos propiamente dichos.
- Respetar los horarios de comida. Cinco o seis ingestas alimenticias diarias (incluyendo tentempiés de media mañana o media tarde) son más que suficientes. Algunos médicos son más flexibles al respecto, y no se preocupan tanto por la cantidad de comidas, sino por el número de calorías Ingeridas diariamente.
- No administre alimentos dietéticos por cuenta propia. Para el éxito del tratamiento es necesario seguir las Indicaciones del especialista que acompaña el caso.
- Incluir al protagonista de la dieta (el chico) en el control de la misma. Si el régimen consiste en el recuento calórico, permita que él anote en una tabla la cantidad de valores diarios consumidos, por ejemplo.
ALGUNOS CONSEJOS PRACTICOS
Más allá de las dietas, existen algunos trucos que podrán contribuir a que los niños mantengan el peso.
- Dejar siempre un poco de comida en el plato.
- Usar platos pequeños.
- Masticar bien los alimentos.
- No comer mientras se desarrolla otra actividad.